- Acusan a Pluspetrol por desinterés de renovar infraestructura y acusar sin pruebas a indígenas.
Servindi, 13 de abril.- Alfonso López, apu de la etnia Cocama Cocamilla desmintió a la empresa Pluspetrol que culpó al "vandalismo de los indígenas" por la mayoría de derrames de petróleo. Por su parte López señaló que los tubos están corroídos por más de 40 años y que nunca fueron cambiados sino parchados con grapas.
Así lo informó el informatorio Observatorio Petrolero Amazonía Norte (PUINAMUDT) quién detalló que Alfonso López Tejada preside la Asociación Cocama de Desarrollo y Conservación San Pablo de Tipishca (ACODECOSPAT).
“Lo que buscan es simplemente responsabilizar a otros, en este caso a los indígenas” cuando la realidad es que Pluspetrol no tiene ningún interés por renovar la antigua infraestructura del oleoducto.
"¿Cómo pueden afirmar que nosotros los indígenas vamos a contaminar nuestro ríos y territorios? Nosotros somos guardianes de la naturaleza porque vivimos en armonía con ella" indicó el apu.
"Ellos tienen el deber de respetar la biodiversidad y el derecho a la vida”, agregó.
Manuel Muro Cortez, representante de la empresa afirmó hace algunos días que “en la mayoría de los casos los derrames son producidos por el vandalismo de los indígenas” en referencia a los contínuos derrames de petróleo ocurridos en las zonas donde tiene presencia esta empresa.
Muro Cortez indicó que “dadas las difíciles condiciones de la selva, no es posible instalar un sistema completo de vigilancia”.
Alfonso López respondió que la empresa tiene el deber de respetar la biodiversidad y el derecho a la vida. Y si tuvieran voluntad y compromiso ambiental si podrían evitar los contínuos derrames.
Sólo para el caso del oleoducto, los sistemas de vigilancia ambiental indígena en Loreto han logrado evidenciar al menos 65 derrames. Recientemente esta experiencia fue felicitada por el Ministerio del Ambiente, la Presidencia del Consejo de Ministros, entre otros.
Carmen Rosa Sandoval, asesora del legal del PUINAMUDT, afirmó que “todas las actividades extractivas cuentan con un marco legal que hace responsable de los impactos negativos a quienes lo causan".
En tal sentido, "las empresas no pueden eludir sus obligaciones por las especiales características de la zona. La actividad petrolera, como cualquier otra, debe asegurar una gestión ambiental eficaz” indicó.
La actividad de extracción de hidrocarburos lleva 40 años en Loreto. Pluspetrol realiza actividades desde el año 1996, comprometiéndose a asumir los pasivos ambientales heredados, como sucede en cualquier otra actividad.
A la fecha los casos de contaminación por derrame de crudo, vertimiento y otros, han llegado a ser verdaderamente trágicos.
Pluspetrol registra en su haber escandolosos derrames como el ocurrido el 2000 en Saramuro, cuenca del río Marañón, donde se derramaron 5500 barriles de petróleo. Asimismo, se contaminó la cocha o laguna Atiliano, cerca de la comunidad de Pucacuro, cuenca del río Corrientes.
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