Por José De Echave C.
2 de agosto, 2010.- El formato de los últimos discursos del presidente García ha sido el mismo. En el afán de diferenciarse de su primer gobierno trata desesperadamente de demostrar que estamos en el mejor de los mundos.
Algunas de sus frases: el Perú ha crecido más y mejor que todos los demás países; seis y medio puntos porcentuales de crecimiento promedio; se han duplicado en cuatro años nuestras exportaciones; se han hecho 130 mil obras en los cuatro años -que entran en cuatro tomos que el presidente deja en el Congreso- y un largo etcétera. A Alan García siempre le ha faltado equilibrio: en el primer gobierno su populismo caótico e irresponsable y en el segundo profesando una suerte de fundamentalismo neoliberal.
También le ha faltado equilibrio al último discurso en el Congreso, antes de finalizar su segundo mandato. Algunas ausencias notorias:
- Ni una sola palabra sobre el tema indígena. Pareciera ser que los sucesos de Bagua para el presidente peruano han ocurrido en otro país. No existe el tema, no ha sido considerado en su discurso y sus políticas seguramente seguirán atropellando los derechos de los pueblos indígenas. Como muestra ya observó y desnaturalizó la ley de consulta previa.
- Tampoco ni una sola palabra sobre el tema del friaje que viene afectando a varias regiones alto andinas. Ni una palabra sobre los más de 200 niños que han fallecido en los últimos tres meses. ¿Para el presidente son pobladores de otro país? La improvisación, la incapacidad y la falta del liderazgo de nuestras autoridades es de escándalo.
- El tema del friaje por supuesto que no encajaba en el recuento exitoso de sus obras, porque entre otras cosas devela los pobres resultados relativos de la lucha contra la pobreza: pese a las cifras que el gobierno muestra de reducción de la pobreza, lo cierto es que los pobres siguen siendo los mismos en el país y en algunos lugares la pobreza aumenta. Según el propio Instituto Nacional de Estadística e Informática, si bien la pobreza a nivel nacional bajó de 36.2% en el 2008 a 34.8% en el 2009; en las zonas rurales la pobreza aumentó de 59.8% a 60.3%.
- El tema ambiental fue tocado tangencialmente y una vez más quedó demostrado que el presidente no conoce y tampoco le interesa el tema. Menciones puntuales sobre el tema Doe Run y lo ocurrido en Huancavelica, no son suficientes. No es cierto que el gobierno haya sido inflexible con estas empresas; al contrario cedió ante el chantaje de Doe Run y le amplió irresponsablemente el plazo de ejecución de sus inversiones ambientales y en el caso de Caudalosa, las autoridades ambientales conocían los problemas de estas operaciones y no hicieron nada.
- ¿Cuánto nos cuestan los más de mil pasivos ambientales mineros que se encuentran regados por casi todo el país? ¿Ha hecho algo serio el gobierno por el tema ambiental? La creación de un Ministerio del Ambiente que aparece pintado en la pared y que no tiene recursos para operar, solo fue un gesto para la tribuna en la coyuntura de las cumbres internacionales, pero nada serio como política de Estado en un tema fundamental para el país.
Estos temas no han estado presentes en la agenda del gobierno en sus primeros cuatro años y menos aun figuran en las prioridades del último año. Habrá que ver como se colocan en los próximos meses en el debate electoral regional y nacional.
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