Recuperación indígena después de incendios

En Bolivia, comunidades indígenas se recuperan de incendios que devastaron cerca de 40 mil hectáreas, entre ellas de cultivos para su consumo.

Servindi, 18 de octubre, 2024.- Luego de casi un año de los incendios que devastaron cerca de 40 mil hectáreas las comunidades indígenas de Tacaba, Tsimane y Mosenten cerca del Parque Nacional Madidi y la Reserva Pilón Laja, los indígenas se organizan para recuperar sus cultivos.

El fuego acabó con cultivos de maíz, cacao, plátano y café, sustento de estas comunidades que en la actualidad temen que nuevos incendios puedan surgir ya que no cuentan con equipamiento para combatirlas, según un artículo de la Red de Información Ambiental.

Un informe de Wildlife Conservation Society (WCS) citado en el artículo de RAI precisa que en 2023 en Madidi se quemaron más de 20 mil hectáreas y en Pilón Laja más de 19 mil.

Comunidad afectada en La Paz

Comuneros como Federico Chipunavi de la comunidad de la comunidad Tres Hermanos en La Paz lamentaron que los incendios hayan provocado la perdida de sus cultivos y señalaron que estos son provocados por personas que tienen intereses particulares.

A ello se suma el truncamiento de TUMI, un emprendimiento que tenía la comunidad Tres Hermanos que elaboraba jabones de tocador y medicinas a base de productos del bosque que fueron arrasados por incendios en noviembre pasado.

La comunidad Tres Hermanos conformada por 23 familias, está ubicado detrás de los cañaverales de la Empresa Azucarera San Buenaventura, empresa de quien deben atravesar sus portones para ingresar a su hogar.

Si bien en la actualidad se están tomando medidas preventivas contra los incendios, el técnico de monitoreo, Armando Isla dijo a RAI que, la presión de la extensión agrícola es fuerte, así como el avance la minería, que también desencadena incendios forestales.

Comunidad afectada en Pilón Lajas

En noviembre del año pasado, Pilón Lajas, territorio de 18 comunidades también fue alcanzada por el fuego que dejó cultivos dañados, fauna muerta y hasta comuneros heridos por intentar apagar el fuego.

El fuego no solamente afectó a las comunidades, incluso está dañada el área protegida, Pilón Lajas que ya no tiene ingresos por turismo, se quemaron sus senderos.

Fernando Ara, representante de esta comunidad reconoce que no están preparados frente a otro posible incendio, pues no cuentan ni con machetes, mochilas, rastrillos.

Por otro lado, en el municipio de Rurrenabaque, las comunidades atraviesan las consecuencias del incendio, sin semillas y una persistente hay sequía.