Tamshi deforesta un valor de más de S/. 250 mills.

Pronunciamiento

Ante la difusión de una serie de publirreportajes y notas periodísticas aparecidos en medios de Iquitos y Lima en los que, por un lado, la empresa Tamshi se da autobombo sobre las supuestas maravillas ambientales y de desarrollo que realiza en el distrito de Fernando Lores mediante el sembrío extensivo de cacao y, por otro, ataca con mentiras
a la defensora ambiental, la ingeniera Lucila Pautrat Oyarzún, directora de la ONG Kené, los colectivos abajo firmantes señalamos:

1. La empresa Tamshi es heredera de Cacao del Perú Norte S.A.C., que comenzó sus actividades en la zona en 2013. Se trataba de una de las 25 empresas que Dennis Melka, de nacionalidad checa y estadounidense, tenía registradas en el Perú, todas ellas dedicadas a actividades agroindustriales en la Amazonía: 17 de palma aceitera y 8 de cacao. El cambio de razón social de Cacao del Norte S.A.C. por Tamshi fue una estrategia empresarial para intentar lavarle la cara a la primera por las barbaridades ambientales y los atropellos a los derechos de agricultores y comunidades indígenas de Loreto y Ucayali cometidos por la empresa, que le habían acarreado numerosas denuncias, no solo en el Perú, sino también en el extranjero, al punto que la junta de accionista destituyó a Dennis Melka de su cargo.

2. Este cambio modificó la personería jurídica de la empresa, pero no la libró de su pasado de comportamiento arbitrario y prepotente, de los cuales Tamshi hoy se beneficia.

3. Entre esas arbitrariedades destacamos dos: la tala del bosque sin contar con permiso de las autoridades regionales de desbosque y de cambio de uso del suelo, como establece la ley vigente, y la adquisición de tierras de pequeños campesinos sobre la base de engaños.

4. La empresa realizó una primera deforestación de 150 ha en 2013 bajo la mirada sospechosamente complaciente de las autoridades regionales. La extensión rápidamente aumentó hasta alcanzar, primero, 2000 ha. Y un poco más tarde, a pesar de la prohibición de continuar con la tala por parte del Poder Judicial, 2300.

Actualmente, el área desboscada supera las 3000 ha. El 98 % de la extensión
deforestada está compuesto por bosque primario. Deforestar esos bosques para dedicar los suelos a la agricultura requería de otro permiso, que la empresa ni siquiera se tomó el trabajo de solicitar. Ya con el escándalo mediático desatado, el Poder Judicial envió una comisión para realizar una inspección ocular. Sin embargo, la empresa le negó la entrada para que realice su trabajo.

Hoy, cuando algunas sentencias les son contrarias, la empresa Tamshi se queja del Poder Judicial y acusa a fiscales de actuar en su contra.

5. En Ucayali, muy cerca de Pucallpa, otra empresa del consorcio de Cacao del Norte S.A.C ha sido responsable de la deforestación de cerca de 10 000 ha que, además, eran reclamadas por una comunidad shipiba como parte de su territorio ancestral.

6. Cacao del norte S.A.C. adquirió las tierras que posee en Tamshiyacu comprándolas a sus titulares, cada uno de los cuales había sido beneficiado de una adjudicación de 50 ha por familia realizada por el gobierno. Con el argumento de que “como no las trabajas el Estado te las quitará”, lo que era falso, la empresa aprovechó el miedo de los parceleros y pagó cinco mil soles a cada campesino por su lote. Dicha suma representa un pago de cien soles por hectárea o 0,01 céntimo por m2. Una auténtica ganga basada en una mentira. Cuando los campesinos se dieron cuenta de la estafa quisieron interponer una demanda para que se les restituya su propiedad, pero era
tarde, porque velozmente la empresa ya había inscrito las parcelas a su nombre en los Registro Públicos de Maynas. De esta compra mañosa se beneficia hoy en día la empresa Tamshi.

7. En el corto plazo la intervención de estas empresas ha sido también altamente rentable. Entre Loreto y Ucayali, las empresas Cacao del Perú Norte S.A.C. (Tamshiyacu) y Plantaciones Ucayali S.A.C. (actualmente también con razón social modificada con el nuevo nombre de Ocho Sur) deforestaron unas 13 000 has de bosques primarios. Según cálculos realizados por el ingeniero forestal Jorge Malleux, experto en manejo forestal, se estima que existen entre 10 y 20 m3 de madera comercial por hectárea. Tomando la media 15m3/ha, esto representa 195 000m3 en total de madera rolliza comercial que, una vez aserrada, se reduce a la mitad: 97 500m3, es decir, a 40 950,000 de pies tablares.

Cada pie puede venderse a un promedio de 2,50 soles. Descontando costos, la utilidad se estima en un sol por pie, lo que representa 40 950 000 soles de ganancia. Negocio redondo de estas empresas preocupadas por el desarrollo social y el medio ambiente. 8. De acuerdo con el Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre del Perú – SERFOR, el valor económico estimado por la deforestación de 3097,41 ha del Patrimonio Forestal y de Fauna Silvestre ocasionados por la empresa, asciende a S/. 252 517 517, que incluyen los beneficios que dejarán de percibir los usuarios del bosque en un horizonte de 30 años, aplicando una tasa de descuento del 4 %, propuesta por el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), así como el costo de restauración de la funcionalidad del área afectada. Cabe añadir, que la instalación de parcelas de cacao por Tamshi ha generado una pérdida de 87 040 toneladas métricas de CO2e.

9. Tamshi argumenta que su trabajo es perfecto para el medio ambiente, pero como hemos señalado, este ha supuesto el cambio de uso arbitrario de los bosques de Tamshiyacu. Se trata en gran parte de bosques sobre suelos pobres, buena parte de ellos bosques de varillal que se desarrollan sobre suelos de arena blanca. Si bien es cierto que son bosques con un inmenso valor biológico por la fauna endémica que albergan, en especial, por las aves, sus suelos son extremadamente frágiles e inapropiados para la agricultura. Esto obligará a la empresa al uso de fertilizantes químicos en grandes proporciones, lo que la descalificará como iniciativa amigable con el medioambiente, que es la imagen con que ella intenta presentarse en la actualidad.

10. Con relación a las demandas interpuestas a la ingeniera9 Lucila Pautrat Oyarzún, presidente de la asociación Kené, las notas de prensa de la empresa Tamshi olvidan señalar que una de ella ya fue desestimada por el Poder Judicial. Estamos seguros que sucederá lo mismo con las dos aún pendientes, porque la ingeniera Pautrat no ha hecho otra cosa que ejercer su derecho de informar acerca de las transgresiones de la legislación ambiental por parte de la empresa.

El medio natural es un derecho de rango constitucional y por tanto el trabajo de preservación del ambiente concierne e interesa a todos y está más allá de los intereses particulares de unos pocos.

Iquitos, noviembre 27, 2023

• Colegio de Profesores del Perú Región Loreto (CPPe)
• Comité de Defensa del Agua
• Fórum Solidaridad Perú
• Frente de Defensa de los intereses del Distrito de Indiana
• Instituto de Promoción Social Amazónica (IPSA)
• REMA
• Unión Nacional de Estudiantes Católicos (UNEC)