Servindi, 25 de diciembre, 2018.- "El trabajo de la FAO sobre cambio climático" es una publicación que reúne los conocimientos más recientes de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, conocida como FAO.
El documento es de apoyo para la mitigación y la adaptación a los efectos del cambio climático. Su contenido tiene una amplia gama de proyectos basados en la investigación y programas sobre el terreno, como parte integral de la Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
La publicación de 40 páginas incluye los instrumentos y metodologías para apoyar los compromisos y planes de acción sobre el cambio climático; por ejemplo, alcanzar la seguridad alimentaria, promover la agricultura sostenible, y emprender una acción coordinada contra el cambio climático.
El cambio climático amenaza la capacidad para garantizar la seguridad alimentaria en el mundo, asimismo para erradicar la pobreza y alcanzar el desarrollo sostenible.
En seguida compartimos la introducción de la publicación.
Introducción
La agricultura sostenible y la seguridad alimentaria están estrechamente relacionadas con los compromisos climáticos y los Objetivos de Desarrollo Sostenible
Entre septiembre y diciembre de 2015, los líderes mundiales hicieron compromisos históricos para abordar los grandes retos a los que se enfrenta nuestro planeta. Prometieron construir un futuro sostenible para la humanidad a través de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible y se comprometieron a tomar acción frente al cambio climático en la Conferencia de las Partes de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático (COP21) a través del Acuerdo de París.
Estos grandes desafíos siguen vigentes hoy en día. El informe de octubre de 2018 del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) encabeza una serie de estudios recientes que apelan a una acción urgente para evitar las consecuencias desastrosas del calentamiento global. El informe destaca que, durante este siglo, las temperaturas podrían aumentar 1,5ºC por encima de los niveles preindustriales, y subraya que 122 millones de personas más podrían sufrir pobreza extrema para el año 2030 debido, principalmente, a una subida en los precios de los alimentos y a una peor salud. El informe del IPCC recalca especialmente la necesidad inminente de una acción concertada para hacer frente a la amenaza existencial a la que se enfrentan, predominantemente, las poblaciones rurales en los países en desarrollo.
Seguridad alimentaria y cambio climático
El cambio climático ya está teniendo profundas consecuencias en la vida de las personas y en la diversidad de la vida en el planeta. El nivel del mar está subiendo y los océanos se calientan. Cada vez hay sequías más duraderas e intensas que amenazan las reservas de agua dulce y los cultivos, lo que pone en peligro los esfuerzos para alimentar a una creciente población mundial. Los medios de subsistencia de agricultores, pescadores y silvicultores, que son los que menos han contribuido al cambio climático, son los que más sufren los fenómenos meteorológicos extremos que dañan la infraestructura, acaban con las capturas, comprometen las poblaciones de peces, erosionan los recursos naturales y ponen en peligro a las especies. Entre 2006 y 2016, el 26% del total de daños y pérdidas causadas por desastres climáticos en los países en desarrollo recayó sobre la agricultura.
Si no se toman medidas urgentes, el cambio climático pondrá seriamente en riesgo la producción de alimentos en países y regiones que ya cuentan con una alta inseguridad alimentaria. Por un lado, afectará al suministro de alimentos debido a la reducción de la productividad de los cultivos, el ganado y la pesca. Por otro, dificultará el acceso a los alimentos, ya que afectará a los medios de subsistencia de millones de personas rurales cuyos ingresos dependen de la agricultura. Asimismo, el cambio climático expondrá a los pobres, tanto urbanos como rurales, a precios de alimentos más altos y más volátiles. También causará, de forma inevitable, la migración por situaciones de dificultad y pondrá en peligro el progreso hacia los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
Estos efectos ya son palpables. La edición de 2018 de El estado de la seguridad alimentaria y la nutrición en el mundo (SOFI) señala que el cambio climático es un factor clave detrás de la repentina subida en el número de personas que padecen hambre en el mundo, que aumentó 17 millones más hasta alcanzar los 821 millones registrados en 2017.
A pesar de ser el sector más vulnerable ante fenómenos climáticos extremos y cambiantes, la alimentación y la agricultura también cuentan con numerosas oportunidades para mitigar y crear resiliencia frente al cambio climático y adaptarse a sus efectos. Si se cumplen los compromisos de los países para transformar los sistemas alimentarios y promover la agricultura sostenible, todavía podemos conseguir un mundo sin hambre ni malnutrición para el 2030.
Acceda a la publicación completa haciendo clic en el siguiente enlace.
- "El trabajo de la FAO sobre cambio climático" (Versión PDF, español, 40 páginas)
Comentarios (2)