Servindi, 21 de mayo, 2023.- El Ministerio de Asuntos Exteriores decidió rendir homenaje al histórico líder indígena Manuel Quintín Lame como una expresión del gobierno de reconocer los aportes de las comunidades indígenas de Colombia.
Para el efecto expidió la resolución 2486 de 2023 en la que decide cambiar la denominación del “Patio de los Novios” el cual será conocido en adelante como “Patio Quintín Lame”.
El recinto se ubica en la primera planta del Palacio de San Carlos, sede de la Cancillería y adquiere la nueva denominación en honor al líder indígena de finales del siglo XIX e inicios del XX en Colombia.
“la vida y obra del abogado, educador, líder y pensador indígena Manuel Quintín Lame es un legado que el Ministerio de Relaciones Exteriores quiere honrar como parte de su imagen institucional en un espacio físico, dado el trabajo que realizó por el reconocimiento, promoción y defensa de los derechos de los pueblos originarios” - Resolución 2486.
La decisión se dio en el marco de la participación de Colombia en el Foro Permanente para las Cuestiones Indígenas de las Naciones Unidas.
No obstante, diversas personas han cuestionado la decisión debido a que Quintín Lame lideró movimientos en contra del Gobierno nacional e incluso un grupo guerrillero retomò su nombre en la década de 1980.
Acceda a la resolución completa con un clic en el siguiente enlace:
¿Quién fue Manuel Quintín Lame?
Nació en 1883 en la Hacienda de San Isidro y sirvió durante la Guerra de los Mil Días en el ejército, espacio que aprovechó para aprender sobre legislación nacional.
Sus estudios, autodidactas, le llevaron a liderar los reclamos de las comunidades indígenas siendo elegido “Jefe Representante y Defensor General” de los cabildos indígenas de Pitayó, Jambaló, Toribío, Puracé, Poblazón, Cajibío y Pandiguando en 1910.
El primer período de su actividad política en el Cauca empieza con la organización indígena y los reclamos por el fin del terraje, y a medida que esta tiene éxito aumenta también la reacción de las autoridades locales e incluso nacionales.
Joanne Rappaport, en el texto ‘Manuel Quintín Lame hoy’, explica que en este periodo de la historia republicana las comunidades indígenas eran víctimas de las expropiaciones de sus resguardos, en favor de los nuevos sectores agrarios.
El levantamiento es reprimido y Quintín Lame es juzgado y pasa un período en la cárcel. Aparentemente sus compañeros y sus ideas desaparecen y todo retorna la normalidad.
Unos años más tarde Lame reinicia su liderazgo en el sur del Tolima. En esta ocasión sus reclamos se dirigen a la reorganización del resguardo de Ortega y Chaparral, y cuenta con el apoyo de líderes tan importantes como José Gonzalo Sánchez y Eutiquio Timoté.
La organización avanza, se organizan cabildos y escuelas indígenas y se logra un reconocimiento del gobierno nacional del resguardo.
Sin embargo la reacción en contra también se fortalece y bajo el manto de la violencia partidista muchos indígenas son desterrados y aparentemente la agitación desaparece y todo retorna a la normalidad anterior.
Entre 1910 y 1920 el líder indígena movilizó a las comunidades del país, principalmente en el sur. Entre las banderas del movimiento se encontraba la consolidación de los cabildos indígenas como órganos de decisión, la afirmación de las culturas indígenas y la recuperación de tierras a manos de los terratenientes.
Las reivindicaciones promovidas por Lame lo llevaron a ser reconocido como uno de los principales dirigentes indígenas del país.
Además de ser entendido como una de las manifestaciones del movimiento indígena en Colombia, de inicios del siglo XX, un movimiento que encontró fuerte eco en procesos como la Revolución Mexicana (1910-1917).
En 1967 muere Quintín Lame en la extrema pobreza en el municipio de Ortega, Tolima luego de haber estado se dice en la cárcel 108 veces y un total de 17 años la mayor parte en detención preventiva.
En 1971 sus seguidores entregan las memorias de Lame para su publicación por la Rosca de Investigación Social. Esta llega a manos del incipiente movimiento indígena que una vez más agita en el Cauca la causa de Lame: acceso a la tierra ancestral y no pago del terraje.
Y se reinicia una vez más el ciclo, con más logros y nuevos retos. El recuerdo del líder indígena fue retomado en la década de 1980, cuando surgió una guerrilla indígena Movimiento Armado Quintin Lame (Maql) en el Cauca.
Este movimiento se diferenciaba de otros grupos armados porque su finalidad no era la toma del poder, sino la protección de los indígenas frente al ataque de los “pájaros”, como eran denominados los terratenientes en la zona.
“El MAQL agarró la memoria de Lame como ícono de la resistencia indígena armada y a la vez, como herramienta educativa. El grupo comenzó desde el principio a difundir su biografía tanto interna como externamente, lo que es evidente en el manifiesto de fundación del grupo”, explica la académica
Te puede interesar:
Quintín Lame, símbolo de una lucha indígena que permanece viva
Afiche de un documento dedicado a Quintín Lame
Desde Hace 50 años descansa justo a sus ancestros, el indígena que en el siglo XX llego al Tolima para fortalecer y reavivar el movimiento indigena del pueblo guerrero Pijao. Así fue la jornada de conmemoración a Quintín Lame, en el marco de la Resistencia contra la expansión petrolera, en el municipio de Ortega, Tolima. Seguir leyendo...
AÑADE UN COMENTARIO