Pese a que en 2012 ya se presentó un vehículo eléctrico en Perú, su uso es inviable debido a la falta de puntos de abastecimiento y su poca difusión.
- Uno de los principales países fabricantes de autos en el mundo ha decidido subvencionar el traslado de todo su parque automotor a coches eléctricos de cara al 2020. De esa manera conseguiría eliminar la emisión de gases de efectos invernadero de su transporte. ¿Podrá el Perú cambiar su política automovilística?
Por José Carlos Díaz Zanelli
Servindi, 4 de mayo, 2016.- Si en algún país del mundo la producción de la industria automovilística es fundamental para la economía interna, ese es Alemania. Y es que esta nación, hogar de grandes fabricantes automovilísticos como Mecedes-Benz, BMW y la hoy polémica Volkswagen, dará el primer paso en la conversión total de su parque automotor.
Y es que, con apoyo del gobierno, se ha impuesto la meta de reemplazar todos sus vehículos que utilizan combustibles fósiles a autos de motor eléctrico de cara al 2020. De esta manera, el Ministerio de Finanzas de Alemania se ha comprometido a subsidiar la compra de autos eléctricos o híbridos que se realicen hasta el 2018.
La subvención puntualmente consistirá en un bono de 5 000 euros para los compradores de autos eléctricos y de 3 000 para los autos híbridos. De esta manera, con una inversión que superará los mil millones de euros Alemania conseguirá evitar casi la totalidad de las emisiones de gases de efecto invernadero provenientes de su parque automotor.
A eso se le debe sumar que los vehículos eléctricos tampoco producen contaminación sonora y que el coste de su circulación por kilómetro es menor que los autos que funcionan a través de la combustión.
Los puntos de recarga de autos eléctricos son mucho más sencillos y a diferencia de los tradicionales grifos, no emiten contaminación. Imagen: www.vialeducativa.com.ar
Perú sin cambios energéticos
Mientras esto ocurre en un país cuya principal matriz de producción es la tecnología automovilística, en Perú el escenario no proyecta síntomas de cambio en su parque automotor que tiene a Lima como una de las ciudades más contaminadas del mundo producto de las emisiones de CO2.
De momento la política del gobierno sigue siendo la de promover la producción de combustibles fósiles. Esto a través de la innumerable cantidad de licitaciones que se entregan cada año en los lotes petroleros de la selva.
El salto a las energías renovables aún es un sueño. No existe una política de uso de paneles captadores de energías solar para fines domésticos y el cambio de vehículos de combustión a motores eléctricos sigue siendo un tema pendiente. Solo una compañía ha anunciado que espera traer en los próximos meses autos híbridos pero estas iniciativas están lejos de contar con el respaldo económico del Estado como en el caso alemán.
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