Servindi, 1 de diciembre, 2020.- Radios Pospandemia. Herramientas y estrategias para la nueva normalidad es una reciente publicación que busca contribuir a dar respuestas prácticas a la interrogante: ¿Cuál será el rol de los medios comunitarios en la “nueva normalidad”?
El libro escrito por dos conocidos radialistas: Inés Binder y Santiago García presenta una serie de herramientas disponibles para producir, grabar y transmitir en el marco de una propuesta integral de trabajo colaborativo descentralizado.
No se trata de un compilado de software ya conocido por las radios sino de tecnologías libres que son las únidas que pueden garantizar la autonomía de las radios, su privacidad y seguridad.
La segunda parte plantea diez estrategias que las radios pueden incorporar a su práctica comunicativa para garantizar la libertad de opinión y el acceso a la información.
Las estrategias fueron identificadas y sistematizadas a partir de experiencias que ya están incursionando en maneras creativas de abordar diversos desafíos informativos y cuyos aprendizajes se han puesto en valor.
Autores
Inés Binder es comunicadora social e investiga temas de feminismo, tecnologías y políticas de comunicación. Es cofundadora del Centro de Producciones Radiofónicas (CPR) y parte del espacio hackfeminis- ta la_bekka.
Santiago García Gago es comunicador social e investiga temas de tecno-política y medios comunitarios. Es consultor de DW Akademie y es parte de RadiosLibres.net, Radialistas.net y la Red de Radios Comunitarias y Software Libre.
Ambos son coautores del libro: Manual para Radialistas Analfatécnicos y de Politizar la tecnología.
La nueva publicación de 64 páginas ha sido auspiciada por la Deustche Welle Akademie y puede ser descargado libremente desde la internet en formato PDF a partir del siguiente enlace de descarga:
PresentaciónA finales de 2019 resultaba difícil de imaginar que en pocos meses la vida de prácticamente toda la población global cambiaría de la noche a la mañana. Un brote viral, que en cuestión de semanas se transformó en pandemia, obligó a los Estados y organismos internacionales a tomar medidas excepcionales de aislamiento físico y freno a las actividades productivas. Todos los ámbitos se vieron afectados. El sanitario, por supuesto, se vio empujado a responder a una demanda que llevó a su personal a una situación límite. El mundo laboral sufrió un parón que obligó a encontrar nuevas formas de trabajo. Trabajadores de las actividades esenciales, como la producción de alimentos, tuvieron que adoptar nuevos estándares de seguridad. Otros sectores descentralizaron sus oficinas e impulsaron el teletrabajo desde casa o directamente tuvieron que suspender sus actividades, dejando en el desempleo a millones de personas. ¿Qué viene luego de la emergencia? ¿Qué lecciones quedarán después de la crisis? Aún es una incógnita, pero las predicciones no son muy optimistas: recesión económica, déficit fiscal y salvatajes a cambio de reformas económicas. (1) Lo que sí parece seguro es que las tecnologías digitales de la información y la comunicación tendrán un papel preponderante en esta “nueva normalidad”. Las medidas de confinamiento tomadas durante la pandemia aceleraron el proceso de mediación tecnológica de las comunicaciones humanas. Ciertamente, estas herramientas hicieron más llevaderos los largos y monótonos días de encierro, facilitando la vida y permitiendo a las familias seguir en contacto, entretenerse, estudiar o trabajar. Toda la sociedad tuvo que incorporar tecnologías digitales a sus tareas cotidianas: plataformas de videollamadas, streaming de audio y video, compras por Internet o webs para la gestión de proyectos y trabajo colaborativo. Su demanda creció de tal manera que las empresas tecnológicas fueron de las pocas que aumentaron sus ingresos en un escenario de recesión global. El mundo de las telecomunicaciones fue, sin duda, uno de los grandes protagonistas durante este período, aunque no siempre de forma positiva. En esta nueva normalidad las radios se encuentran ante desafíos a los que quizás no se habían enfrentado antes. Por un lado, el uso que harán de Internet necesariamente tendrá que ser más intensivo. Las medidas de distanciamiento físico las obligaron a aprovechar los beneficios de las herramientas y tecnologías digitales para producir colaborativamente desde estudios descentralizados en las casas, emitir la programación desde cualquier lugar y aumentar la participación de la audiencia. Pero, por el otro, al intensificarse el uso de las tecnologías también aumentaron los riesgos y debates a los que las radios deberán enfrentarse. El creciente uso de la aplicación de videollamadas Zoom expuso las fallas de seguridad que exponían a quienes la usaban. Cuando Apple y Google se asociaron para instalar una aplicación de rastreo de personas contagiadas de Covid-19 en iOS y Android, quedó en evidencia la altísima concentración del mercado de sistemas operativos móviles y la necesidad de proteger los datos personales de la población. La divulgación de noticias falsas sobre la pandemia puso a ciudadanía ante los grandes problemas de desorden informativo y su impacto en la democracia.
¿Cuál será el rol de los medios comunitarios en la “nueva normalidad”? ¿Cómo comunicarán en un mundo que, de alguna manera, ya no será el que conocían y en el que las desigualdades se habrán profundizado? El uso de las herramientas digitales condicionará la forma en que la que las radios comunican y, necesariamente, abrirán un profundo debate sobre el poder de la comunicación comunitaria para mejorar las condiciones de vida de la población. Radios Pospandemia. Herramientas y estrategias para la nueva normalidad es una propuesta para llevar adelante iniciativas de comunicación comunitaria bajo las condiciones de incertidumbre pospandemia. La primera parte presenta una serie de herramientas disponibles para producir, grabar y transmitir. No se trata de un compilado de software ya conocido por las radios –como editores de audio o automatizadores– sino de una propuesta integral de trabajo colaborativo descentralizado. Son, prácticamente en su totalidad, tecnologías libres ya que son las únicas que pueden garantizar la autonomía de las radios, su privacidad y seguridad, y la capacidad de adaptarlas a las necesidades de cada contexto. Además, muchas de ellas son gratuitas, aunque es recomendable apoyar a las personas que las desarrollan. La segunda parte plantea diez estrategias que las radios pueden incorporar a su práctica comunicativa para garantizar la libertad de opinión y el acceso a la información, y que les permitirán posicionarse en un lugar de relevancia en el panorama informativo pospandemia. Estas estrategias fueron identificadas y sistematizadas a partir de experiencias que ya están incursionando en maneras creativas de abordar diversos desafíos informativos y cuyos aprendizajes hemos puesto en valor. Nota:
(1) Deutsche Welle (2020, junio 10). La economía mundial vive su peor recesión desde los años 30, según la OCDE. Deutsche Welle. https://p.dw.com/p/3dZ1o.
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— Servindi (@Servindi) August 11, 2020
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